La sequedad de la vegetación y del suelo hacen posible la rápida expansión del fuego en la zona. Según el sitio Redes Sociales de Caá Catí, ayer aviones hidrantes sobrevolaron la zona para combatir los incendios y se trasladaron hasta el lugar bomberos de Caá Catí, Paso de la Patria y San Luis del Palmar y otras localidades.
Mientras tanto una dotación de bomberos de San Luis del Palmar se dirigieron hacia la estancia Santa Julia, en la zona de los esteros de Las Maloyas, para combatir las llamas que se registraban en la zona y se supo que lugareños combatían ayer el fuego en campos cercanos a los esteros donde hay mayor fuego.
El director de Recursos Forestales de la Provincia, Roberto Rojas, especificó que desde Provincia se encuentran monitoreando constante la región, “sin embargo, todavía existen quienes deciden continuar con las quemas, las cuales se encuentran prohibidas debido a la emergencia ígnea”, dijo en referencia al productor que habría quemado basura y sería responsable del reinicio de los incendios en Lomas de Vallejos.
“Respecto al fuego lo que les puedo decir es que nosotros monitoreamos permanentemente a diario las áreas afectadas y las vamos relevando en comparación con años anteriores”. Sin embargo, admitió que todavía quedan irresponsables que no toman dimensión de la necesidad de mantener prácticas de prevención para evitar nuevos focos incendiarios. “Detectamos que aún hay personas que persisten y trabajamos para que esta práctica se deje de realizar, es algo muy peligroso, puede llegar a ser algo incontrolable”, aseveró.
Ambientalistas alertan que mientras se mantenga La Niña, el evento climático que está afectando gran parte del territorio nacional hay riesgos de nuevos incendios y los climatólogos ya adelantaron que las lluvias se mantendrían por debajo de los valores normales en toda la parte oriental del país, como el Litoral y este de la provincia de Buenos Aires para este trimestre.
Las lluvias fueron el factor decisivo para apagar los múltiples focos de incendios que arrasaron Corrientes, con casi un millón de hectáreas quemadas en todo ese territorio, de acuerdo a cifras publicadas por el Inta, de todos modos, hay sectores de la provincia, donde las lluvias aún son escasas y el riesgo está latente.
Los incendios registrados hasta fines de febrero consumieron el 12% de la superficie provincial, es decir más de un millón de hectáreas. De ellas más de la mitad corresponden a áreas naturales: esteros, bañados y pastizales.