Los anillos de Saturno serán invisibles desde la Tierra en 2025, según la NASA

La agencia espacial explicó que se trata de un fenómeno que pasa cada 13 a 15 años en el que la rotación del planeta en un eje inclinado hace que los anillos reflejen muy poca luz, haciéndose difíciles de observar

 

Los anillos de Saturno serán prácticamente invisibles desde la Tierra en 2025, según confirmó la NASA. Pero no significa que el planeta vaya a perder sus asombrosos aros, sino que se volverán alineados o “edge-on” debido a la rotación en su eje, haciéndolos esencialmente invisibles desde la Tierra. La última vez que algo como esto sucedió fue en 2009.

Este fenómeno se produce aproximadamente cada 13 a 15 años, debido a que el planeta rota en un eje inclinado de 26.7 grados. Vahe Peroomian, profesor de física y astronomía en la Universidad del Sur de California, explicó en entrevista con CBS News, que cuando los anillos de Saturno se ven de canto “reflejan muy poca luz y son muy difíciles de ver, lo que los hace esencialmente invisibles.”

Los anillos de Saturno están compuestos en su mayoría de partículas de hielo de agua con un tamaño que varía desde pequeños granos hasta enormes bloques. También presentan trazas de polvo y rocas. La proporción exacta de estos materiales varía en los diferentes aros. Estas partículas orbitan alrededor del planeta y le dan a los anillos su apariencia brillante debido a la forma en que reflejan la luz del Sol.

Aunque parecen muy grandes y visibles desde la Tierra, no lo son en realidad. Extendiéndose hasta 281.635 kilómetros desde la superficie del planeta gaseoso, estos anillos solo alcanzan una altura vertical de 9 metros y debido a esta delgadez, cuando se ven perfectamente desde el lateral, es decir, de canto, resultan casi imposibles de observar, generando la ilusión de que han desaparecido, explicó el diario, The Hill.

Según datos históricos publicados por FOX News, Galileo Galilei fue la primera persona en observar a Saturno a través de un telescopio en 1610. Sin embargo, su aparato no pudo distinguir la peculiaridad que destaca a este planeta y fue Christiaan Huygens quien finalmente reconoció en 1655 que Saturno tenía un anillo o anillos que estaban desprendidos a su alrededor.

Desde este descubrimiento, los científicos han estudiado estas estructuras y la misión Cassini-Huygens de la NASA determinó que probablemente se formaron hace unos 100 millones de años, lo que es relativamente reciente para el espacio. Saturno, es un gigante gaseoso de 4 mil millones de años y no es el único planeta con anillos, pero según la NASA, tiene los más espectaculares y complejos.

Están desapareciendo
En 2018, la agencia espacial anunció que las misiones Voyager 1 y 2 confirmaron hace décadas que Saturno está perdiendo sus anillos. James O’Donoghue, del Centro de vuelo espacial Goddard de la NASA, explicó que estos están siendo atraídos hacia el planeta por la gravedad como una especie de lluvia polvorienta de partículas de hielo bajo la influencia del campo magnético.

Esta “lluvia de anillos” produce suficiente agua para llenar una piscina olímpica cada media hora y podría provocar que los anillos de Saturno desaparezcan en 300 millones de años. Además, la nave espacial Cassini determinó que el material del anillo está cayendo hacia el ecuador del planeta, lo cual podría acelerar aún más su desaparición, posiblemente en 100 millones de años.

Saturno pasa rápidamente, siendo un día en el planeta —el tiempo que tarda en dar una vuelta— de apenas 10.7 horas. Sin embargo, le lleva unos 29.4 años terrestres completar su órbita alrededor del Sol. Y al igual que la Tierra, Saturno experimenta estaciones, lo cual es causado por sus rotaciones en un eje.

A pesar de la desaparición de los anillos de Saturno en 2025, este evento cósmico debería ofrecer una gran visión de muchas de sus 146 lunas. Tal como publicó The Hill, la NASA cree que la masa de las lunas en órbita alrededor del planeta es lo que causa el cambio en la inclinación de Saturno y continuará ocurriendo durante los próximos mil millones de años.