“Hoy estamos concretando la adquisición aeronáutica militar más importante desde 1983. Se trata de 24 aviones F-16 que han sido modernizados y equipados con la mejor tecnología, y que hoy se encuentran al nivel de las mejores aeronaves que vuelan en los cielos de la región sudamericana y del mundo”, dijo Petri.

En marzo el Gobierno de Argentina había firmado una carta de intención para la compra de los aviones. El Ministerio de Defensa confirmó en ese momento que el ministro Petri y su par danés, Troels Lund Poulsen, habían firmado un documento en Buenos Aires para avanzar con la adquisición, concretada este martes.

“Estamos equipando a nuestras Fuerzas y recuperando la capacidad supersónica del país”, comunicó en marzo la cartera de Defensa en X.

El ministro de Defensa de Dinamarca también compartió las novedades tras esa reunión. “Tuve un encuentro extremadamente fructífero con mi colega argentino, quien expresó gran satisfacción por volverse miembro de la familia de naciones F-16 alrededor del mundo”, dijo Poulsen en un comunicado.

Poulsen agregó que además de los 24 cazas que se venderán a Argentina, Dinamarca donará otros 19 F-16 de su flota a Ucrania.

En el mismo sentido, el Gobierno de Estados Unidos —que colaboró en las negociaciones entre Buenos Aires y Copenhagen y aprobó previamente la venta de estas aeronaves— celebró en marzo el acuerdo a través de las redes sociales de su embajada en Argentina y del Departamento de Estado: “Estados Unidos da la bienvenida a Argentina a la familia de naciones F-16”.

El Gobierno de Dinamarca está en proceso de reemplazar su flota de F-16 por los nuevos F-35, que son aviones más avanzados y con mayores capacidades de combate. Ambos son fabricados por la empresa estadounidense Lockheed Martin.

¿Cómo son los aviones F-16?

Se trata de aeronaves muy versátiles, que pueden alcanzar velocidades de hasta 2.400 km/h, es decir dos veces la velocidad del sonido, y que la Fuerza Aérea de EE.UU. califica como un “sistema de armas de alto rendimiento y costo relativamente bajo”.

Argentina no posee aviones de combate supersónicos en servicio tras el retiro en 2015 de sus cazas Mirage III, que hasta la fecha no han sido reemplazados.

Los F-16 que Buenos Aires busca comprar son aviones supersónicos polivalentes de un solo motor a reacción. Esto implica que pueden usarse en diferentes tipos de misión, ya sea aire-aire o de ataque a tierra.

El directorio de Fuerzas Aéreas Mundiales de Flight Global asegura que los F-16 son los aviones de combate más activos en el mundo, con casi 2.200 de ellos actualmente en el aire.

Esa gran cantidad de unidades garantiza la disponibilidad de repuestos para mantener su capacidad de combate, señalaron especialistas a CNN.

Un informe del Servicio de Investigación del Congreso de Estados Unidos (CRS, por sus siglas en inglés) de marzo de 2023 advierte que “la capacitación del personal de mantenimiento puede llevar meses o años, según el nivel deseado de competencia”. Los aviones necesitan 16 horas de mantenimiento por cada hora de tiempo de vuelo, detalla el mismo reporte.

Con respecto a la capacitación de los pilotos, la mayor complejidad no está en aprender a volar, sino en adquirir las capacidades de combate. Este proceso podría llevar años, según los especialistas.

Los F-16 fueron diseñados en la década de 1970 y han estado en servicio operativo desde 1978. Dinamarca adquirió sus primeros ejemplares en 1980, y gradualmente fue ampliando su flota.

Según la Fuerza Aérea danesa, los aviones hoy pretendidos por Argentina han sido actualizados “continuamente” y “corresponden en gran medida a la última versión del avión F-16 en términos de instrumentos y sistemas de armas”. Agregan que están equipados con un cañón de 20 milímetros y estaciones para llevar bombas, cohetes y misiles.